¿Por qué es tan importante controlar el pH de tu piscina?

Mantener el pH del agua en niveles adecuados no es solo una recomendación técnica: es esencial para la salud de quienes usan la piscina y para el buen funcionamiento del sistema de filtrado.

¿Qué es el pH y por qué importa?

El pH mide el nivel de acidez o alcalinidad del agua. En el caso de las piscinas, el valor ideal debe estar entre 7.2 y 7.6. Este rango garantiza una experiencia segura y cómoda para los bañistas, y también ayuda a conservar en buen estado el equipo de mantenimiento.

¿Qué pasa si el pH está desequilibrado?

Si el pH está por debajo de 7.2 (agua muy ácida):

• Puede causar irritación en los ojos y la piel.

• Acelera la corrosión de los metales del sistema (como bombas o accesorios).

• Reduce la efectividad del cloro como desinfectante.

Si el pH está por encima de 7.6 (agua muy alcalina):

• El agua puede volverse turbia.

• Aparecen depósitos calcáreos en paredes y equipos.

• Disminuye la acción del cloro y se facilita la aparición de algas.

  
  

¿Cada cuánto debo medirlo?

Se recomienda controlar el pH cada 15 días, especialmente en temporadas de uso intensivo, como verano. Un simple test kit te permite hacer esta verificación en casa, de forma rápida y precisa.

Tips para mantener el pH en equilibrio

✔ Usá reguladores de pH (subidores o reductores) según las indicaciones del fabricante.✔ Revisá el pH siempre que agregues productos químicos al agua.✔ Mantené una rutina de control junto con otros parámetros como el cloro y la alcalinidad total.

Conclusión

Controlar el pH no es un detalle menor: es una tarea clave para que el agua esté limpia, segura y libre de complicaciones. Incorporalo a tu rutina quincenal y asegurate de que tu piscina siga siendo un espacio de disfrute todo el año.